Síndico, No Palero

El tigre no cambia sus rayas.

por Eduardo Morán C.

1 Mayo 2015 - Estoy cierto (como se dice en campaña) que con la décima parte del dinero y trabajo invertido en el municipio en las pre y campañas políticas de Martín Medina, Gustavo García, Manuel Olvera, Sergio Vázquez, Armida Murillo, Ana Lilia Jiménez, Jorge Allec, Jorge Sánchez, Obdulio Solís, Fernando Leyva, Eric Fernández, J. Antonio Reyes, Pedro Quiroz, Cristóbal Aburto, Héctor Astudillo, Beatriz Mojica, Luis Walton e interminable pléyade más de prohombres y mujeres Guerrerenses bien paridos y paridas (como se dice en campaña), ya se hubiera podido hacer una efectiva y sobre todo urgente campaña de fumigación para evitar que el dengue y la chikungunya, trajera de malas y bien picoteados a los electores que en unos días más, siempre y cuando puedan sostenerse de pie, con su voto entraran sin escala al paraíso.

Entiendo que los partidos llamados chicos no tengan recursos para ello, pero los llamados grandes los tienen de sobra, pues de no ser así sería imposible que los derrocharan en espectaculares, publicaciones en medios y magnos eventos el día anterior y el siguiente al menos pensando, a todas horas y por todos lados. Resulta por demás contradictorio que quienes prometen gastar los recursos de los electores de manera eficiente, gasten una fortuna en prometer que no harán lo que están haciendo, y peor aún, que esa estrategia les funcione. Es decir, el mismo ciudadano que se dice harto y hasta indignado por el despilfarro que hacen sus gobernantes de sus recursos, no tiene empacho en votar por quienes les demuestran en vivo y a todo color que lo seguirán haciendo. Para Ripley el asunto.

Se de antemano que si se emprende una campaña de fumigación como estrategia política, serán los partidos que cuentan con más recursos y estructura los que sacarán mayor raja de lo que estoy mencionando, pues como ya sabemos en una campaña política el que tiene más dinero traga más votantes. Sin embargo, creo que si como ciudadano me la he pasado criticando a los partidos, gobernantes y candidatos, no ahora por formar parte de la planilla de Sergio Vázquez Rosas del Partido Humanista debo dejar de hacerlo. Bastante ridículo me voy a ver echando pestes cuando estoy afuera, y callando idioteces y abusos cuando pretendo entrar. Porque lo que me propongo hacer, digo, si me llego a sacar la rifa del tigre, es seguir haciendo lo que siempre he hecho como ciudadano.

Al contrario de todos los políticos que les prometen "el cambio" o "un gobierno diferente", yo prometo que ni voy a cambiar ni voy a actuar diferente, porque entiendo que me metí a competir por ser síndico de los Azuetenses, no palero del que gane.

Es todo...