Si no fuera
suficientemente mal que el gobierno municipal de Zihuatanejo encabezado por el
Lic. Gustavo García Bello hace caso omiso a las leyes del Bando de Policía y
Buen Gobierno y en su defecto permite la operación de más de 60 bares en el
primer cuadro del Centro, muchos en flagrante violación de numerosas leyes, muchos
operando hasta las 6:00 de la mañana, bares ruidosos que no dejan dormir a la
gente decente y trabajadora y mucho menos a los turistas quienes la mayoría ya
ni se molestan a hospedarse en el Centro como solían hacer, el ayuntamiento
también hace caso omiso a sus deberes de proporcionar cualquier semblanza de
seguridad pública, dejando que los clientes borrachos y drogados de estos bares
cometen toda clase de delito, fechoría y daño a terceros a su gusto sin ninguna
consecuencia, molestia o inconveniente.
Por la
segunda vez en menos de 2 meses un vehículo aparentemente conducido por una persona borracha y/o drogada chocó con mi automóvil. Acabo de gastar casi 10
mil pesos en repararlo con mucho sacrificio, pero esta madrugada de nuevo fue fuertemente
golpeado casi en el mismo lugar. De por si los escándalos de los borrachos en
las calles y el ruido de los numerosos bares cercanos no nos permite dormir sin
múltiples interrupciones, perjudicando nuestra salud. Ahora por la falta de
vigilancia y la falta de la sencilla aplicación de las leyes, el patrimonio de
mi familia sufre de nuevo un golpe fuerte.
Como
contribuyente, padre de familia y ciudadano responsable no puedo quedarme con
los brazos cruzados. No puedo quedarme callado. El culpable tiene nombre y
apellido, y es el presidente municipal de Zihuatanejo como el encabezado de respetar,
hacer respetar y aplicar las leyes del municipio. Lejos de cumplir con su deber,
le hace caso omiso con el inválido pretexto que no le compete, como me
respondió hace unos meses. El resultado es un pueblo sin ley, sin seguridad
pública, y con policías que cobran sin trabajar ya que casi no salen de sus
cuarteles y mucho menos hacen rondines a pie en el Centro donde se encuentran
la mayoría de los comercios establecidos incluyendo los bares.
Sí pasan los
militares y policías estatales adscritos a la BOMUS en sus vehículos con poca
frecuencia, pero ellos ignoran las leyes municipales o de tránsito, y no las
aplican. No hacen nada para callar los bares ruidosos, asegurar que cierren a
la hora que marca la ley, y muchos menos detienen a los conductores borrachos.
Yo culpo al presidente
municipal por la falta de hacer lo que marca la ley para que Zihuatanejo tenga orden,
paz y tranquilidad. Yo culpo al presidente municipal por andar en campaña en
lugar de estar haciendo estrategias para combatir la delincuencia. Yo culpo al
presidente municipal por ignorar una y otra vez los numerosos y repetidos
reclamos de los ciudadanos sobre este mismo tema de los bares y los borrachos y
la ausencia de seguridad pública municipal en las calles del Centro sobre todo
en las noches y los fines de semana.
Si la
policía municipal no va a trabajar como es su deber, que los despidan y ahorrar
el dinero. No es justo que el presidente municipal los dejan en sus cuarteles mientras
el pueblo teme por su seguridad y su integridad física, mientras personas
honestas y trabajadoras sufrimos una y otra vez las consecuencias de las
fallidas políticas del presidente municipal.
Sí le
compete. Le compete por seguir firmando y expidiendo los permisos para los
bares, ignorando los reclamos múltiples e históricos de los ciudadanos vecinos.
(BPBG Título 9° Cap. XII Art. 284).
Sí le
compete. Le compete por hacer caso omiso a las leyes que juró respetar y hacer
respetar como son los siguientes del Bando de Policía y Buen Gobierno que
tratan de las operaciones y las afectaciones a terceros de los bares y los lugares
que venden bebidas alcohólicas: Título 16° Cap. I Art. 402, 403, 405, 407, 409,
411, 413 entre otros.
Sí le
compete. Le compete por tener amplio conocimiento del problema pero no actuar
en los intereses de la mayoría de la población sino hacer caso omiso a su deber
y a su responsabilidad a nosotros. Lejos de informar al público que está
trabajando en una estrategia para corregir las violaciones en flagrante de las
leyes, parece andar en campaña regalando marranos y dádivas en las colonias
populares y en los asentamientos irregulares. Está muy bien que atiende a las
necesidades de los menos afortunados, pero no está bien ignorar las necesidades
y los reclamos de personas cuyas patrimonios están perjudicados por sus propios
actos de omisión a su deber.
El día 24 de
agosto del año en curso el presidente municipal me nombró con otros ciudadanos
para formar un Comité de Consulta y Participación Ciudadana en la Prevención
del Delito. La prensa le sacó muchas fotos sonrientes del presidente municipal para
su publicación, pero de que yo sepa no ha habido ninguna reunión desde
entonces, posiblemente porque no hay nada más que recomendar aparte de que el
presidente municipal aplique las leyes. ¿Qué caso tenemos haciendo
recomendaciones cuando vemos que el presidente municipal está obviamente
haciendo caso omiso a sus deberes de aplicar las leyes con respeto a la
seguridad pública?
Ya no me
doblo. No me quedo callado. Es hora de actuar. Es hora de denunciar. Es hora de
obligar al presidente municipal a cumplir con su deber o renunciar.
Responsabilizo
directamente al presidente municipal Lic. Gustavo García Bello por la
integridad física de mi familia y yo y por cualquier afectación negativa a
nuestro patrimonio.